JOE BORUNDA - Guitarrista de Hello Seahorse!
(Twitter: @joeborunda)
Hace algunas semanas un amigo me escribió para que comentara sobre un artículo que escribió para la revista GQ. Su artículo trataba sobre como apoyar a tu artista favorito. Abarcaba puntos que van desde no comprar piratería hasta compartir la música, recomendarla. Todos puntos válidos; y todos con el objetivo principal de crear conciencia en el público de que un artista necesita recursos para seguir haciendo música. Con el paso del tiempo se ha vuelto más complicado para los artistas vivir de su trabajo.
Todas las recomendaciones a los fans, como es no comprar piratería, asistir a los conciertos, comprar el álbum, seguir la redes sociales, todas son de extremo valor y vitales para el artista. Sin embargo, para la mayoría de las bandas, la suma de toda esta entrega por parte de sus fans no será suficiente para conceder que los creadores de la música puedan vivir de ella. Es ahí donde pareciera que los consejos para apoyar nuestros a artistas favoritos, más bien deberíamos dirigirlo a los mismos artistas.
David Thomas de Pere Ubu fue quien dijo que “el rock se trata principalmente de mover cajas negras de un lado de la ciudad al otro en la cajuela de tu carro”. Si bien el rock no es para todos, por muy choteada que sea esa frase, la realidad para la mayoría de todos los que estamos en esto es que seguiremos cargando pesadas cajas negras hasta el final de nuestros días. No importa que tengas staff, nadie se salva de no cargar (bueno, quizás bandas como Mana, pero ¿quién quiere esa fama?).
La primera cuestión es: ¿realmente quieres pasar buena parte de tu vida en una van y cargando equipo? Seguido sobre los servicios de música por internet, porque me gusta hacerlo y porque creo que no se irán a ningún lado. Todo lo contrario. La competencia los irá abaratando y el público podrá tener acceso con muchas más facilidad a todo el catalogo musical del mundo. Pero reconozcámoslo, ni las políticas que podamos reformar en estos servicios, ni Taylor Swift, ni Jay-Z, ni todos los fans unidos, van a salvar a los artistas para que puedan recibir una compensación justa por su trabajo. Tampoco podemos navegar contra la marea.
Por supuesto existen páginas de internet y servicios que trabajan por donación o colocan la música a un precio fijo. Y es aquí donde siempre me hace ruido la presentación de la mayoría de quienes se justifican con estos servicios. Tú puedes apoyar a tu artista favorito mediante donación o comprar su material en línea. Tu artista. En verdad ninguno de nosotros solo escuchamos a “un artista” y repetir la fórmula por la cantidad real que artistas que escuchamos hoy día resulta absurdo. Tan absurdo como era llenar tu iPod de música legal a través de iTunes.
Para la mayoría de nosotros, dedicarse a la música, dedicarse al rock, implica tener un trabajo o un ingreso lateral. Son pocas las bandas en México o Latinoamérica con giras vendidas y cierres de festivales internacionales. Inclusive, eso no garantiza ninguna estabilidad económica hoy día. “Este es un negocio, pero un pésimo negocio”, canta Jorge González (de Los Prisioneros) en su sudamerican rockers, con toda la ironía y el descaro que lo caracteriza.
Esta mañana me hicieron una pregunta en entrevista, una pregunta de esas de cajón que le hacen mucho a las bandas con cierto nivel de relevancia: "¿Qué le recomiendas a las bandas que están iniciando?" Y claro, damos la respuesta romántica que quieren escuchar: "Sigue tu sueño, paciencia, dedicación" y todas esas cosas. Pero siendo honesto, mi respuesta es: "No renuncies a tu trabajo aún, no coloques todos los huevos en esta canasta".
