REDACCIÓN QRP 

Vivió solamente 23 años, pero eso le bastó para convertirse en leyenda. La historia de la música actual no podría ser comprendida sin Ian Curtis, quien se encargó de iniciar la evolución desde su natal Manchester, Inglaterra. 

Su inquietud musical inició en 1976 con el grupo Warsaw, que posteriormente pasaría a llamarse Joy Division en 1978. Ian fue el artífice del nacimiento del Post-Punk y el New Wave. Destacó también por su sombría voz de barítono, la cual impulsó a varias bandas a emularlo. 

Diversos cuadros de epilepsia y trastornos que padecía fueron los causantes de su deterioro mental. Casado y con una hija, tuvo más de una aventura con otras mujeres, pero siempre estuvo enfocado en su banda y en crear grandiosas canciones como 'Disorder', 'Something Must Break', 'Heart And Soul', 'Love Will Tear Us Apart', 'Decades', 'Novelty' y 'Digital'. 

Ian Curtis participó en los exitoso y legendarios dos únicos discos de Joy Division. Dio un golpe de autoridad y de lo que estaba por venir en el Rock con 'Unknown Pleasures' (1979) y encabezó la búsqueda y permanencia de la música electrónica con 'Closer' (1980). 

Aficionado al futbol y al Manchester City de su país, Curtis decidió suicidarse al colgarse del techo de su propia casa el 18 de mayo de 1980. Desde ese momento inició su legado que continuará por generaciones.

Recordemos a Ian Curtis con 'Transmission', uno de sus grandes himnos:

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